Los moldes cúbicos en el control de recepción de hormigón fresco

3C ya está utilizando como procedimiento habitual de control de recepción de hormigón fresco el molde cúbico de 150x150x150, en preferencia sobre el tradicional molde cilíndrico de 150×300 mm.

El objetivo de este nuevo procedimiento es alcanzar las siguientes mejoras:

  • mejora ergonómicas en el trabajo diario de nuestros operadores (probeta+ más molde cúbico pesa unos 8.500 g frente a probeta+molde cilíndrico que pesa unos 15.000 g),
  • mejoras en consumo energético (menor carga de los vehículos = menor consumo) y
  • mejoras medioambientales (evitamos el refrentado o pulido de las probetas)

Para alcanzar estos objetivos hemos invertido en la adquisición de nuevos moldes cúbicos, así como realizado un ajuste específico para rotura de probetas cúbicas en una de nuestras prensas hidráulicas; además nos vemos obligados a una continua y exhaustiva vigilancia del estado de los moldes disponibles, por ser la probeta cúbica muy sensible a las alteraciones geométricas que puede causar un molde deteriorado.

En el ánimo de la administración está el promover el uso de este nuevo sistema de control de hormigones; habiendo sido introducido en año 2008 por lo que la vigente Instrucción de Hormigón Estructural EHE08, en su artículo 86.3.2.

Durante el año 2018 hemos procedido a realizar un amplio estudio comparativo entre las resistencias obtenidas entre probetas cilíndrica15x30 y cúbica15x15; fabricando probetas cúbicas y cilíndricas en unos 100 muestreos de hormigón. Además llevamos años participando en ensayos interlaboratorio de fabricación de probetas cúbicas/cilíndricas, tanto a nivel comunitario, organizados por el IGVS (Xunta de Galicia), como a nivel nacional en el programa EILA, organizado por el Comité de Infraestructuras y la Subcomisión para la Calidad de la Edificación (CICE y SACE) del Ministerio de Fomento, a través del Instituto Eduardo Torroja (CSIC).

De todos estos estudios hemos establecido que el factor de conversión se mueve entre 0.85 y 0.95, siendo el valor habitual para hormigones de 20-40 MPa el 0.90, en coincidencia con el factor establecido por la EHE vigente.